"Hace siglos fueron refugio de filibusteros y piratas, hoy en
día son el Paraíso de turistas y científicos."
Hermoso
archipiélago de origen volcánico, se encuentra formado por 13 islas y 47
islotes. Se ubica a 600 millas de la costa ecuatoriana y es el lugar de
nacimiento de nuevas y características especies. Su aislamiento y los factores
de temperatura en aguas frescas, debido a la localización ecuatorial, han
motivado la creación de una gran diversidad de vida en este archipiélago.
Problemática,
especies invasoras en las islas encantadas.
Con
el pasar de los años, Galápagos se ha convertido en una atracción turística
popular, hecho principal por el cual la
flora y fauna que conforman dichas islas está en peligro, producto de la
intervención del ser humano.
El
archipiélago de Galápagos es un parque nacional protegido en un 97% en cuanto a
su territorio geográfico, sin embargo poco a poco ha incrementado la población y
el número de habitantes en las islas debido a la demanda turística.
Al
momento de considerar que Galápagos se está tomando en cuenta más como un
centro turístico que como un área protegida, como consecuencia, se da prioridad
a las necesidades de las actividades humanas en lugar de la protección del
ecosistema. Es así como se empieza a practicar actividades agrícolas y a
transportar alimentos y textiles para la comodidad del público turista.
Es
así como en barcos y aviones, se transportan ilegalmente especies que no son
endémicas de la zona, como cabras, hormigas, ratas, gatos salvajes o el arbusto
de la mora, extrañas e invasoras para la flora y la fauna de las islas
Galápagos, amenazan el equilibrio de uno de los lugares más especiales del
planeta.
La erradicación de esas especies, cuya presencia desafía la
conservación del ecosistema original de Galápagos, pretende lograr la
restauración ecológica de las islas y mantener su ciclo evolutivo que, hace 150
años, inspiró a Charles Darwin en la creación de su teoría sobre la evolución
natural de las especies.
Sin embargo, el control que existe no es eficiente ya que
siguen existiendo especies ajenas a las islas protegidas por lo cual al mismo
tiempo se observa un desequilibrio del ecosistema. La solución sería simple, la
actividad turística tiene que cesar para que el ambiente se recupere y tanto
flora como fauna de la zona se mantenga protegida y libre de la extinción a
causa de la contaminación e irresponsabilidad de los seres humanos que no
sabemos valorar nuestros propios tesoros.
ES NUESTRO DEBER PROTEGER A ESOS QUE NO SE PUEDEN DEFENDER!!!!!